La Federación de Vecinos y Vecinas de València ha
denunciado este jueves las diferentes quejas que han llegado por parte de
algunas asociaciones ubicadas en zonas turísticas y de ocio con respecto a
las terrazas de los establecimientos de hostelería.
Si bien es cierto que esta entidad reconoce el esfuerzo y responsabilidad
de la gran parte de los empresarios, esto tampoco implica que se dejen de
denunciar comportamientos abusivos que pueden poner en riesgo la salud
y el esfuerzo realizado hasta ahora por la mayoría de los valencianos y
valencianos.
Al respecto, la presidenta de la Federación, María José Broseta, ha
asegurado que desde asociaciones de vecinos como Amics del Carmen,
Russafa-Gran Via, Ciutat Jardí (plaza del Cedro), Benimaclet o El Palmar
han alertado de un exceso de mesas y sillas, por encima del 50%
permitido.
Al respecto, Broseta ha aclarado que el acuerdo al que se llegó con el
Ayuntamiento y los hosteleros implicaba la posibilidad de ampliar la
superficie destinada a terraza, con la opción de bajarlas a la calzada, con el
objetivo de hacer posible que se respetaran las distancias de seguridad de
ese 50% de terraza: “en ningún caso, al menos esta Federación así lo
entendió, el aumento de superficie estaba destinado a que pudieran
poner más mesas y sillas del 50% de su permiso habitual, como así está
sucediendo en muchos puntos de la ciudad”, ha comentado.
Ante esta situación, Broseta ha hecho un llamamiento a la responsabilidad
y al civismo, ya no solo de los propios hosteleros, sino también de los
clientes para que se respeten de forma estricta todas las medidas de
seguridad, y ha solicitado un mayor control al respecto por parte de la
Policía Local: “la Policía debe intensificar la vigilancia y sancionar a los
locales que incumplen y desacreditan a la mayoría que sí se esfuerza por
atender todas las condiciones”.
“Somos conscientes de que los hosteleros, como tantos otros sectores, lo
están pasando muy mal y somos los primeros en querer ayudarles, pero
todo tiene que ir dentro de un orden y sobre todo cumpliendo las normas
de seguridad sanitarias”, ha comentado Broseta.
Recuerda, finalmente, que esta excepcionalidad ha de estar condicionada
a la protección de la salud y el respeto al descanso y hace un llamamiento
a la responsabilidad de la población.