La presidenta de la Federación vecinal, María José Broseta, acudió el 18 de abril a la toma de posesión de Joan Calabuig como nuevo presidente de la Autoridad Portuaria de València. “Esperamos que ahora haya un diálogo que sea real, que no se enroquen las posturas, que se pueda ver cuáles son las posibilidades, los enfoques, porque todo es potencialmente posible o imposible”, manifestó.
María José Broseta aseguró que con el anterior presidente, Aurelio Martínez, había sido “difícil” entenderse porque “se negó a volver a hacer otra declaración de impacto ambiental; y en todas las ampliaciones que ha habido siempre se veía que el puerto era lo único que importaba”.
Desde la Federación vecinal recuerdamos que importa la ciudadanía, “tanto la que reside en Poblats Marítims como la del resto” y ponemos el foco en otras de las tensiones abiertas entre ciudad y puerto como es la cesión del suelo de la Marina o la Zona de Actividades Logísticas (ZAL).
“La ciudad participa poco en las decisiones del Puerto y hay muchos temas por resolver, como la deuda con La Punta o Natzaret”, recordó la presidenta de la FAAVV, quien señaló así todas esas carpetas abiertas que Joan Calabuig tendrá que ir abordando.