Este lunes 10 de febrero ha tenido lugar en el Ayuntamiento de València una reunión en la que la alcaldesa María José Catalá ha agradecido el trabajo del movimiento vecinal organizado de la ciudad de València tras la dana. En la misma, los representantes de las asociaciones vecinales también han transmitido cuestiones necesarias para la mejora de la gestión y coordinación por parte de las administraciones públicas.
En la reunión con María José Catalá y la concejala de Participación y Acción Vecinal, Julia Climent, han asistido, además de la presidenta de la Federació d’Associacions Veïnals de València, María José Broseta, representantes de cinco asociaciones vecinales que pusieron a disposición sus locales y desarrollaron un intenso trabajo de recogida de alimentos y materiales en el que participaron socios y socias de las asociaciones junto a centenares de voluntarios y voluntarias de cada uno de los barrios. Por parte de la asociación vecinal de Benimaclet han asistido Amparo Cifre y Paco Guardeño; de Zaidia, Majo Angulo; de La Isla, Teresa Martín; de Nou Moles, Casilda Osa y Amparo Moya, y de Patraix, Toni Pla.
En este encuentro, Catalá ha puesto en valor y ha agradecido todo el trabajo impulsado desde la Federación vecinal y desde las distintas asociaciones, que se volcaron desde el primer momento para desarrollar acciones de ayuda a las personas afectadas por la dana, con el impulso de muchísimos compañeros y compañeras de las mismas y muchos vecinos y vecinas que se sumaron al trabajo voluntario.
En la misma reunión, los representantes del movimiento vecinal han trasladado al Gobierno municipal distintas cuestiones que se han ido planteando desde los propios voluntarios y voluntarias para la mejora de la coordinación, como la información y transparencia sobre la distribución, la facilitación del trabajo de los voluntarios en las zonas afectadas o el uso y la imprescindible activación de los recursos públicos en situaciones de este tipo.
Acción voluntaria del movimiento vecinal
Desde día siguiente a las fatídicas riedas, la Federación y las asociaciones vecinales coordinaron un trabajo de recogida y distribución de materiales que fue pasando por distintas fases. Las necesidades fueron cambiando y también se fue adaptando la propia forma de ayudar, respecto a los puntos de recogida, los materiales a recoger y también la distribución.
Junto al Ayuntamiento de València, la Federación se coordinó para que el propio Ayuntamiento recogiera con sus camiones estos materiales varias veces al día por los locales de las asociaciones para su distribución en las zonas afectadas.
Estos materiales se fueron llevando a las pedanías afectadas (La Torre, Castellar-Oliveral y Horno de Alcedo). Pero también a los pueblos afectados del área metropolitana en l’Horta Sud.
Desde las asociaciones vecinales, el Ayuntamiento de València cargó más de 200 camiones.
Pero también se trabajó desde el movimiento vecinal en la distribución directa sobre el terreno en las zonas afectadas, sobre todo en los primeros días en los que había más urgencia, cargando vehículos en colaboración con otras entidades sociales y otros voluntarios y voluntarias que se llevaban directamente a las zonas afectadas para su entrega directa.
Además, desde el primer día contactaron con la Federación y las asociaciones personas, organizaciones y empresas desde distintos puntos de todo el Estado y también del extranjero. Camiones con grandes cargas de donaciones (en algunos casos con materiales específicos muy necesarios, como mangueras o maquinaria), que se fueron gestionado desde el movimiento vecinal para que se distribuyera directamente.
Una red vecinal totalmente necesaria
Desde el movimiento vecinal se siguen canalizando algunos envíos de grandes cargas de donaciones de materiales y maquinaria gestionando su envío directo a donde hace falta.
Además, cada Asociación hace también sus trabajos particulares de apoyo, incluso organizando brigadas de voluntarios para enviar a las zonas que siguen estando muy dañadas.
Es necesario poner en valor una vez más el trabajo del movimiento vecinal organizado. Un trabajo, como siempre, voluntario y centrado en la colaboración y ayuda a todos los vecinos y vecinas.
Para cualquier ciudad, y también para la ciudad de València, contar con una red de apoyo vecinal fuerte es decisivo. Tanto en el día a día como, por supuesto, cuando surge una coyuntura tan excepcional y dramática como ésta. Y es muy importante que esa red vecinal esté organizada, esté correctamente coordinada y esté abierta siempre a la participación
Una asociación vecinal en un barrio es siempre referencia cuando se detectan carencias o necesidades en el barrio. Una asociación vecinal es el lugar donde se acude a compartir esas necesidades, a debatir sobre las propuestas y a organizar el trabajo para que esas necesidades se cubran, colectivamente y con la implicación de las Administraciones y los servicios públicos.
La historia, también la más reciente, ha demostrado que disponer de esa red vecinal fuerte es fundamental para la mejora de los barrios, la mejora de la ciudad y la mejora de la calidad de vida de los vecinos y vecinas.